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ECO Nº 302 - DEL 14 AL 27 DE ENERO - 2022

Imagen de Doctor Santiago Gutiérrez en el consultorio de Cabranes

NOTICIA DE LA QUINCENA

EL NUEVO MÉDICO

DOCTOR SANTIAGO GUTIÉRREZ-BRODARD:

“Estaba cansado de ciudad, quería hacer medicina rural y mi mayor disposición la tengo”

Se llama Santiago Gutiérrez-Brodard González y desde el pasado 3 de enero (lunes) se desplaza diariamente desde Oviedo (donde reside) a Santa Eulalia porque es el nuevo médico de nuestro Consultorio local. Con él llega la paz tras meses de protestas por recuperar en el Concejo este servicio, fijo y sin rotaciones. Se ha mostrado cordial, cercano, familiar. Le hemos entrevistado y así ha respondido a nuestras preguntas.

¿Cómo te surgió el venir aquí?

Yo estaba trabajando en Oviedo, en un Consultorio del centro de la ciudad y me enteré de una plaza que iba a salir a traslados, pues hubo recientemente un movimiento de plazas entre los médicos que estamos eventuales. Al final escogí venir para acá, directamente. Estaba cansado de ciudad y quería rural, al menos una temporada.

¿Es tu primera experiencia en la zona rural?

Como tal, sí, aunque ya trabajé en la zona del Valle del Nalón, en urbe, básicamente, si bien hacía también pueblos. Pero como Consultorio Rural, sí, es mi primera experiencia.

¿Y cómo están siendo, cómo te están resultando estos primeros días aquí, en Cabranes?

Movidos, porque con el tema del covid la verdad es que estamos teniendo muchísimos problemas. No hay médicos, con lo cual el pasado lunes (día 9) tuve que hacer esta Consulta de Cabranes, a mitad de mañana me tuve que ir a Bimenes a hacer aquella Consulta porque el médico de allí se puso malo y a las tres de la tarde de ese mismo día entré de guardia en Nava hasta las ocho de la mañana del día siguiente. El martes  -después de esa guardia-  libré. Y como no hay médicos no pudieron enviar a nadie aquí. Es, pues, un poco complicado; pero, en todo caso y respondiendo en concreto a la pregunta, la verdad es que bien, bien. La gente del pueblo es mucho más llana, más fácil de tratar que la de la ciudad.

¿Te esperabas eso que acabas de describir o ha sido una sorpresa?

Son pocos días los que llevo aquí para valorar; además, con dos o tres libranzas que he tenido. Pero, más o menos, me esperaba, a nivel de gente, como lo que estoy encontrando. Buena gente, en general.

La medicina en el mundo rural, ¿es un reto? ¿Te agrada?

Sí. Quizá si tuviera menos experiencia me daría miedo, básicamente porque no es lo mismo hacer medicina en Oviedo (que tienes el Hospital a cinco minutos) que hacerlo, por ejemplo, aquí, aunque para mí son cuarenta minutos de desplazamiento. Y es que, en todo caso, hay un campo  de  posibilidades  urgentes  (como  un infarto, etcétera) que te pueden dar un poco de inquietud. Pero estoy preparado.

A propósito de experiencia, ¿se puede contar cuántos años llevas de servicio?

Empecé en 1992. Lo que pasa es que estuve muchos años en la medicina privada, porque en el Servicio de Salud del Principado en aquella época había promociones con mucha gente, un exceso de médicos tremendo, radicalmente distinto a lo que hay ahora, y el trabajo era escaso. Entonces, me dediqué a hacer medicina privada muchos años. Hace ocho, aproximadamente, me salté a la pública. Me cansé de la privada y di el salto a la pública.

Sobre esta plaza de Cabranes, ¿tu pronóstico es optimista, en el sentido de que se cubra o puedas continuar entre nosotros?

¡La continuidad…! Eso está bien. Yo ahora desconozco con detalle si esta plaza salió a traslado. No tengo aquí la documentación para poder confirmarlo. Pero, hombre, yo creo que seis meses, como mínimo, sí que estaré aquí. Seis meses, sí. En ese sentido ese optimismo sí lo tengo.

El problema que teníamos aquí, desde la marcha  -en mayo-  del anterior médico, era de servicio diario y sin rotaciones. ¿Esto ya lo vamos a tener garantizado contigo?

En principio, sí. Y me explico: Yo ahora estoy aquí, no en otro lugar. Pero tengo días a la semana con libranzas (al día siguiente de una guardia, en otro sitio, que pueden ser dos o tres al mes). Esos días no voy a poder venir y casi aseguro que no va a haber quién me sustituya, porque no hay profesionales disponibles. También puede ocurrir que me llamen de Gerencia a cubrir alguna otra plaza, pero puede ser puntual y no habitual. Por lo tanto, en principio, va a haber continuidad conmigo.

¿Y algún mensaje concreto para los cabraneses, para tus pacientes? Quizá, que vamos a ver cómo funcionamos aquí durante los dos primeros meses, ya que posiblemente estén acostumbrados a otra forma de trabajo, y acaso de incertidumbres, por eso que he explicado. En todo caso, lo importante es que nos conozcamos poco a poco. Mi mayor disposición la tengo. ■

Acto de constitución de la Plataforma Vecinal, en el Ayuntamiento. Su presentación, con la primera manifestación de protesta, fue el 16 de octubre de 2021, en la Plaza del Emigrante y después hasta Casa del Río.

Agradecimiento a la Plataforma Vecinal

Esta situación del Consultorio Periférico “nos trajo un verano bastante diferente de los anteriores en esta materia y quiero empezar agradeciendo la colaboración del equipo que hicimos con la Plataforma Ciudadana sanitaria en el sentido de que nosotros agotamos toda la vía institucional y ellos hicieron ese complemento de los medios de comunicación en la calle y que en conjunto dio el resultado esperado”.

Así comenzó explicándose Gerardo Fabián en el punto del orden del día dedicado a los “Informes de la Alcaldía” del primer Pleno del año (el del pasado lunes, 3 de enero), para agregar:

“Hoy conocí personalmente a Santiago, el médico que se incorporó y que va a estar hasta que se cubra la plaza en el concurso de traslados o quede vacante y entonces continúe él, no descartándose tampoco una posible comisión de servicios en la plaza de Bimenes y que podría dar lugar a cambios. En cualquier caso, estamos ahora en una situación de estabilidad equivalente a la que teníamos hasta el mes de mayo  -cuando estaba el doctor José Luis Vigón-  y podemos decir  que  estamos  de  enhorabuena,

que empezamos el año con una solución a un problema que era bastante complejo y que debemos estar agradecidos. Y como bien decía el otro día la Plataforma y compartimos plenamente, seguiremos pendientes para que esta situación se mantenga como ya está desde este lunes”.

Brindis navideño de la Corporación Municipal

Solución en cascada

Al término de esta sesión, y durante el corrillo formado por los miembros de la Corporación Local para brindar (foto de la página siguiente) por el nuevo Año (con una botella de sidra de Denominación de Origen), se retomó este tema y el Alcalde precisó, sobre la vía de desatasco alcanzada, que “al incorporar a un montón de efectivos, la Consejería dio cobertura a todos los Consultorios que arrastraban este problema, incluido el nuestro”.

El concejal y portavoz de VecinosxCabranes, José Luis Miyar, le indicó que “el subdirector nos habló que iban a tener dos meses a uno mientras la plaza vacante era cubierta”.

Le reiteró el Alcalde que “la vacante puede quedar desierta o no. Podría venir uno en propiedad o coger esa vacante otro  -como éste actual, Santiago-  y generar una comisión de servicios. Santiago podría quedarse si la plaza queda vacante; y si alguien la coge, el que la coja puede ocuparla o generar una comisión de servicios. Si ocurre esto, también puede seguir Santiago, como pasó con la plaza de enfermería la última vez”.

Miyar apuntó, por su parte, que “el otro día le pedimos también que en la jornada en la que le toque descansar, se cubra ese vacío, y comprometióse a ello”.

“De todas maneras  -dijo Fabián-, cuando tienes un médico titular, el hecho de que tenga una guardia  -Santiago tiene dos al mes-, si ya lo sabes con antelación, ya se lleva de otra manera. Lo importante es que el médico, tu médico, sea siempre el mismo, y como consecuencia de ello haga un mejor seguimiento de cada caso y dé más confianza al paciente, sobre todo a la gente mayor. Santiago me manifestó que le gustaba venir a ejercer a un pueblo y le vi activo y con ganas de integrarse”. Continuó José Luis Miyar indicando que “sería importante incrementar un poco las cartillas, pues el subdirector se quejaba de las 642 actuales…”.

(Dicho subdirector, de Atención Sanitaria y Salud Pública del Área IV, es Antonio Molejón, y el encuentro con él, el 29 de diciembre, fue para entregarle la Plataforma Vecinal las 1.300 firmas que había recogido en las protestas).

Le contestó el Alcalde que, “bueno, eso volverá. En los últimos tiempos hubo un éxodo por el problema que surgió de no tener facultativo fijo y a diario y por el asunto de las rotaciones; pero cuando esté estable el servicio   -y el primer paso ya se ha dado-  volverá la confianza y aumentarán las cartillas. Vamos a empezar el Año bien”.

Alegría de la Abuela

Precisamente ese mismo día 3, por la mañana, ya tuvo conocimiento la Abuela del Año, (Laudelina Prida; ver página 9 y siguientes de este número) de que había nuevo médico. Lo supo en el transcurso de la conversación que mantuvo con el Alcalde, cuando éste acudió a entregarle la placa. Ella entreveró que se hablaba del tema y preguntó:

¿Solucionóse eso del médicu?. Y a la respuesta afirmativa, dijo: “¡Ay, gracias a Dios. Porque ye una pena que tengas a una persona enferma y no hay quién la atienda, y tener que desplazase hasta Nava o sabe Dios…”.

El Alcalde le explicó: “Fueron resueltos todos los conflictos que hubo abiertos desde el verano”.

Ella: “Claro. Dicen que los médicos no tienen mucha gana de venir; pero, oye, en los pueblos tenemos derecho a tener atención como en les poblaciones, porque ye justo, ¿eh?, que una persona enferma tenga quien la cure”.

Se interesó y preguntó incluso, Laude, por la antigua casa-vivienda del médico, en Santa Eulalia. Cuando le expusieron que sobre sus cimientos se levantó la actual Residencia de Personas Mayores, concluyó: “Que tenga o no casa ye lo de menos. Lo importante ya que la población esté atendida”. ■

Laude junto a su hija en la casa familiar de Torazu

REPORTAJE.  LA ABUELA DEL AÑO

Una Abuela de oro y mensaje:

“Si quieres que no te hagan mal, no lo hagas”

Torazo. Lunes, 3 de enero de 2022. 12:00 horas. Acto de entrega de placa de reconocimiento, como Abuela cabranesa del Año, a Laudelina Esther Prida Coya. Día soleado (fue a ser el último del llamado veranillo de San Silvestre).

No hace falta ningún esfuerzo para que Laude rompa a hablar, con una locuacidad y precisión de datos, a sus 97 años (nació el 13 de abril de 1924), portentosa. Así lo hizo, nada más asomarse por la puerta de su casa  -casi fronteriza con la escalinata de la iglesia parroquial-  y ver a la comitiva municipal (Alcalde  -Gerardo Fabián- y su segunda Teniente  -Virginia Naredo Préstamo-, delegada territorial aquí) y a cuantos la esperaban. “Non puedo más que saludaros, porque la conversación la oigo muy mal; pero, bueno, dentro de lo que cabe, doy gracias a Dios por estar con vosotros y por traerme eso”. Fueron las primeras de sus muchas palabras, antes de sentarse “en el banquín, muy amañosu p´a todos”, junto a la puerta de su vivienda, donde el sol invade su cara con tanta alegría que hasta precisa de una sombrilla; para continuar: “Ahora tengo quién me atienda bien. Aquí vivo desde que me casé; antes, en La Portalada, porque mis padres estaben en una casería de un hijo de un tío nuestro, y luego compraron una casa en La Miyer, donde tengo allí una huertina. Ya no voy, a no ser que me lleven, porque p´a subir ya me cuesta. Mi marido (José Valdés Cuesta) estuvo un tiempo encargado de la panadería. De aquella eran tres panaderos. Trabajaben muchu pan y después ya hubo más competencia con otros sitios. Ahora tienen coches y hacen el transporte con más comodidad, pero a él todavía le tocó repartir con una cesta grande, de canasta, cuando aquí había cinco tiendes, que eran La Llanxa, La Parra, Casa Collera, Casa Melchor y la Parrilla, y había gente p´a todas. Acuérdome yo de por lo menos cien persones a les que conocí y sé los nombres de cada una. Así que fíjate si tengo ya años”.

¿Y qué tiempos son mejores, éstos o aquellos?

¡Hombre, p´a vivir, éstos! Por una parte, porque hay muches más comodidades. Antes teníamos que ir a lavar a los ríos y adonde podíamos; al Tabayón que llamábamos, según se va p´a Bañenes, por un prau con una gran pendiente y el lavaderu estaba fondu, con un escayal tremendu. Piénsolo ahora, que si sale una culebra yo me moriría allí.

¿Ahora, todavía trabajas algo?

Ahora hago de tou un pocu: Leo el periódico, veo la tele (aunque, como oigo mal, también a veces me estorba) y tejo (tovía hice no sé cuántos gorrinos para el mercadillo navideño). Tejer gústame muchu, porque estoy pensando si ahora tócame así, ahora de la otra manera. Y distráigome. También cosí muchu toda la vida, remendando. P´a decite francamente, hablo muchu asturianu, pero teníamos que ser todos de una misma lengua. Sería más fácil. En el mercadillo no estuve. Irene (de Incós) hizo muchu por él y quería que fuera, pero entendí que no estaba p´a ir porque donde hay mucha gente, como no oigo bien y no puedo alternar en la conversación, pues no me siento a gustu.

Laude recibió la placa de manos del Alcalde sentada en su ´amañosu bancu´, a la entrada de su casa. Después comenzó a explicarse profusamente. Viriginia Naredo, en la imagen de la derecha, comparte ese momento.

¿Qué hay que hacer para llegar a tu edad?

Mira: Ni tomo café ni tomo ninguna clase de bebida. Cuando hay les Navidades y ciertes coses en la familia, un orange o una cosa de eses, pero la mejor bebida ye el agua, aunque sea del grifo,

que también está con desinfectante y puedes tomalo. Y les grases, no. La sal, tampoco.

¿Qué es lo que más te gusta de cada día?

¡Ah, a mí gústame de tou! (Su hija, Loli Valdés, interviene para precisar: “Ella tien buen carácter. Cualquier día lo agradez, siempre le viene bien…”).

También has dicho que lees la Prensa…

Sí, aunque ahora ya no veo como veía. Ya veo un pocu más mal. Al sol procuro ver eses letres pequeñines  -les grandes, en cualquier sitio les veo-, porque la tinta ahora paez que ye más pálida; antes era más oscura y más negra, ahora paez que ye muy suave. Y me gusta leer a uno que ye amigo de Toño y que se llama Oscar Buznego.

Háblanos de la vestimenta que se llevaba en tu época…

¡Ay, les sayes hasta los pies! Y digo yo, Dios mío, la güela mía, lo mismo la materna que la paterna, teníen que trabajar al campu y arremangar aquelles sayes, cómo iben a poder hacelo. Y la ropa negra, muy oscura, con toquilles. De los días de fiesta no me acuerdo muchu. Supongo que cambiaríen, aunque fueren sayes,

a una ropa más fina, sobre todo por el veranu. Les úniques fiestes que se celebraben era el Corpus y la Virgen del Carmen. Yo creo que todos los que fuimos de la edad mía recordamos a la Virgen del Carmen con cariñu, si tenemos fe. Yo tengo fe. El que no la tenga, oye…, pero como yo digo, el mundo ye muy grande y todos tenemos derecho a vivir, unos de una manera  -de una idea- y otros de otra.

Laude y Virginia, en plena conversación, ante una foto de la primera, de hace unos ocho años.

¿Cómo fue tu luna de miel?

¡Aquí! Antes, fíu, era así. La suegra mía decía que, cuando  ese viaje, llegó hasta Gijón. Nosotros, ni a Gijón ni a Oviedo ni a ningún lau. ¿Sabes cuándo disfruté del viaje? Cuando Dimas, que en paz descanse, organizaba excursiones a varios sitios. Y con un cura que hubo aquí también fui de excursión a varios sitios. Pasélo bien, ¡claro que lo pasé bien!. Con el Imserso nunca fui, porque Pepe, que en paz descanse, no era amigu de correr. Gozaba en Casa Melchor leyendo el periódicu o estando con gente. Al cine fui una vez en mi vida, a la película “Los Diez Mandamientos”. Y al teatro Riera, de La Villa, sí, con Pepe, que tenía una Vespa y entonces íbamos. Allí vi a Manolo Escobar, que cantaba muy bien. A mí, cuando iba a trabajar, también me gustaba cantar, como eso de Dónde estará mi carro... Ahora la gente no canta. Parez que está más triste. Pero también ye verdá que en esti mundu hubo muchu cambiu.

¿Y tú estás contenta de que haya cambiado?

¡Hombre, claro, claro que estoy contenta! Porque hay que vivir con los tiempos. Yo estoy contenta dondequiera que estoy. En cualquier sitio y circunstancia estoy a gusto.

Porque también te tocó vivir la Guerra Civil, ¿no?

¡Huy, claro que me tocó! Durante un tiempo hubo que entregar el maíz cuando lo recogíes,  y dábente en Santa Eulalia harina, en la que encontrabes piedruques. Cuando la guerra no se pasó nada bien, no; pero, bueno, no fui yo sola quien lo pasó mal, fue mucha gente.

¿Y cómo ves a la juventud de hoy?

Bueno, no la veo como la de antes. Porque antes los padres  -a mí, por lo menos-  enseñáronnos que había que respetar a los mayores. Todos antes eran tíos:  Tía  Vicenta,  tía  Luisa, tía María. Ahora hay rapaces que ni te miren. Otros sí, otros háblente, y cuando un ye mayor, agradezse. Yo echo de menos esos tiempos en que todos me saludaben. Iba con les vaques a praos de Cervera o de La Cotariella y todos me decíen buenos días. Aquí, en Torazo, hubo dos maestros que se llamaben don Higinio y doña Eloína, que teníen hasta cien niños y ochenta niñas, porque había alguna casa con trece y la que menos, con cinco o seis. Yo de maestra tuve a doña Eloína, que después trasladaron a Sama. Era oriunda de Ribadesella y fue una señora que nos aprendió a respetar y a obedecer. De lo mejor que se puede dar a una persona, los consejos más sanos los daben ellos, toda vez que el señor maestro actuaba igual. Tras jubilarse, vivió en Gijón, don Higinio. En una ocasión le visitamos ¡y nos lo agradeció tanto!. Fue un señor modelo, modelo.

¿Cuál es el consejo que más das a tus hijos, a tus nietos y bisnietos?

¡Ay, que sean buenes persones! Y que no quieran p´a otru lo que no quieran p´a ellos. Porque tú, si quieres que no te haga nadie mal, no lo hagas tú. Respetar a los demás. Que haya respetu, vaya; que cada un viva bien dentro de lo que cabe, pero respetándose siempre los unos a los otros.

Eres un tesoro total…

No, tesoro, no, porque todos tenemos faltes. Cada persona ye suficiente p´a gobernar su casa. Si gobierna bien, mejor para él; si mal, peor. Pero nunca debes meterte en casa de los demás. Yo el día que falte voy tranquila, porque nunca hice mal a nadie.

Con su hija, Loli; el esposo de ésta, Toño; y su bisnieto, Hugo.

Desde esta casa (del año 1886) estás al corriente de todo…

¡Hombre!, estoy al lado e iglesia más visitada que ésta nunca la vi; que aunque sea ahora, con esto de la pandemia, vienen rapacinos y ¡tú sabes lo que gocen de peldañu en peldañu, corriendo de arriba abajo…! Así que no te dura el tiempo.

¿Qué es lo que más te gusta de comida?

Yo, p´a la edad que tengo, gana de comer tovía la tengo. Y tou me gusta. Ahora cómese muy bien. Antes, n´a más que fabes y patates; y torta, y eso que no faltara. Ahora, pollo, pescado, de todo. Antes, ¿el pescado quién lo comía? Yo creo que ni los ricos comíen como comen ahora los más probes.

Pero aquí llegaben les pescaderes. ¿O no?

¡Home, sí ho me sí! Veníen desde Lastres. Pero teníen que hacelo les probes muyeres con un barcal en la cabeza o con un burro y unes canastes con felechos p´a escorrer les mosques. Desde Lastres a pie hasta cierto sitio y después en un camión o en lo que fuera y por los pueblos repartiendo. A mí lo que más me gustaben eren les sardines, en lugar de los chicharros. Otros peces como hay ahora, de esos pescados buenos, ni hablar. Así era la vida; en la que no hay mejor cosa que estar conforme con lo que uno tien y no ambicionar lo que tienen los demás. No por tener mucho se es más feliz. Al contrario: Teniendo lo necesario, ¿pa que quiero un montón de coses o de dinero  -no debiendo nada a nadie-?.

¿Tú esperabas ser Abuela del Año aquí, en Cabranes?

No. Eso no lo esperaba. No lo esperaba con esta atención que tenéis conmigo y ye un agradecimiento y un recuerdo p´a los que queden p´a toda la vida. Lo que menos creía yo es que nadie me homenajeara. Muy guapo, muy guapo, hombre. Precioso.

Da el reloj del campanario la una de la tarde, con tañido limpio y hermoso, que a Laude le ayuda, sobre todo, durante la noche. De manos del Alcalde y de su Teniente recibió el galardón (“a eso venimos hoy, a entregártelo”). Y ella, con una repentización juvenil, dulce y sorprendente, concluye y reitera: “No lo merecía yo esto. Gracies a todos por tou. Ya queda recuerdo p´a mí y p´a los que vivan, pa tiempo.” ■ Fotos: EL ECO DE CABRANES

Con el comienzo del nuevo año ha empezado a aplicarse la normativa de consumo por la que se amplían los plazos de las garantías legales de los bienes, subiendo de 2 a 3 años, incrementándose, además, a diez años el período obligatorio en que los fabricantes deben disponer de piezas para facilitar la reparabilidad de los productos. Aprobada esta Ley en abril, forma parte de una “estrategia de fomento de la economía circular destinada a aumentar la durabilidad de los bienes y reducir el impacto ambiental del modelo productivo”.

►También, desde el 1 de enero, los españoles que quieran jubilarse con el cien por cien de la pensión tendrán que tener al menos 66 años y 2 meses cumplidos, en virtud de la reforma de pensiones de 2013, en la que se elevaba progresivamente la edad desde los 65 a los 67, en un horizonte total de 15 años. Esos 66 años y 2 meses será la edad que se exija para quienes acrediten menos de 37 años y 6 meses de cotización. Si se superan los 37 años y 6 meses cotizados, los trabajadores que quieran jubilarse con el cien por cien de la pensión tendrán que tener 65 años cumplidos.

Hacemos EL ECO DE CABRANES: Enrique Corripio Monestina (redacción y contenidos, correo electrónico: encomo54_arroba_gmail.com), Laureano Corrales Pérez (Área de Recursos), Noelia Muñío Sánchez (Difusión en la Red), Dolores Fabián Llavona   y  José Andrés Vega Vitienes (Difusión impresa) ● Equipo fundador en 1906: Cesáreo Del Valle, Jesús Arango, Jesús García-Robés y Joaquín Álvarez de la Villa ● Primera Época: Hasta 1914 / Segunda Época: 1984-1993 / Tercera Época: Desde enero de 2015 (Semanario) y desde el nº 267 (quincenal). ● Editado en Santa Eulalia de Cabranes (Principado de Asturias – España) ● Precio del ejemplar en papel: 1 €

Los niños, recogiendo los regalos en el escenario Real. / Fotos: EL ECO

Una Cabalgata (casi) como las mejores

Los Magos volvieron a ejercer de tales y este año, si cabe, con muchas más magia y sabiduría, venciendo obstáculos increíbles y regalando a los más pequeños del Concejo y a sus familias una guapa y celebrada noche de la ilusión (5 de enero, 20 h.) que traspasó la frontera de la recepción para alcanzar niveles de casi normalidad.

Llegaron ellos a la Plaza del Emigrante precedidos del Misterio (para el Belén viviente en el kiosco, coronado por una luminosa estrella (foto de pág. siguiente). Y al carpintero San José y a la Virgen María le siguieron un séquito de gala portando antorchas. A su vez, a este séquito también le precedió un camión con su caja repleta de regalos… y con los sillones de Sus Majestades.

Alineadas las antorchas a ambos lados del kiosco y depositados aquí tales regalos, se desplazó ese vehículo a por Melchor, Gaspar y Baltasar, quienes, una vez al lado de esos regalos, comenzaron a repartirlos entre  todos  los  niños presentes, de forma ordenada, a prevención del covid y con el auxilio de sus pajes. Promovía gozo ver a los niños retornar con las manos apretando el obsequio real. Para entonces, y ya desde el comienzo, el numeroso público asistente pudo ir saboreando el chocolate con bizcochos o churros que el Ayuntamiento ofreció en honor a tan ilustres y anuales visitantes, que ”un año más no han querido dejar fuera de su agenda la visita al Concejo de Cabranes y a su Capital, por la gran acogida que año tras año se les dispensa” (y con el abrigo de ese típico y propio Belén).

Asistentes a la cabalgata

No hubo mensaje real, pero sí trascendió esta impresión, comunicada por megafonía; una megafonía, municipal, que también estrenaba equipo, ganando en sonoridad y en cercanía (con un reluciente micrófono inalámbrico). Su buena respuesta fue también celebrada y desde ella se apuntó que Epifanía  -la fiesta del día siguiente-  “es palabra griega que significa aparecer y mostrarse, especialmente en bondad y solidaridad”, como fue expresión esta hermosa noche. Ayuntamiento, Biblioteca municipal, Protección Civil del Concejo, Asociaciones y colectivos locales contribuyeron a su gran logro (aumentado por una excepcional ausencia de lluvia, lo que no ocurrió, dos horas antes, en otras localidades de Asturias, como en las más importantes  -Oviedo, Gijón y Avilés-, según testimonio televisivo). ■

Carla Fernández Crespo (con su premio, aún sin desembalar), Gerard Nierga (exhibiendo su diploma) y el Alcalde, con dos fotos de la exposición al fondo.

La ornitología y el paisaje centraron el Premio de fotografía de Otoño

Se procedió este pasado lunes, día 10 de enero (17:00 horas), en la Casa de Cultura María Josefa Canellada (primera planta del Ayuntamiento) a la entrega de estos galardones, que recibieron los distinguidos por el jurado, concretamente, Gerard Nielga Armengol (vecino de Arriondo/Arriondu) en la categoría de adultos; y Carla Fernández Crespo (de Castiello y con familia en Torazo) en la categoría juvenil.

El Alcalde precisó en este acto que la edición de este año estuvo dedicada a la ornitología y al paisaje, en la totalidad del Municipio y no en un determinado entorno (como la senda fluvial del río Viacaba, hace dos años).

Ambos premiados recibieron de sus manos un diploma acreditativo (con nuevo logo, alusivo a los pájaros), más 400 euros (Gerard) y globo terráqueo luminoso y un libro (Carla).

Ésta nos comentó que su foto ganadora  -que reprodujimos en nuestro anterior número-  “está hecha en Castiello, debajo de un hórreo; y me dio trabajo, pues al principio eché a correr para captarlo y tuve que esperar a que el pájaro no se moviera y confiara en mí”.

Carla, enfrascada en su globo terráqueo, con el Alcalde, su madre y Gerard al fondo.

Ya es la tercera vez que alcanza este éxito y le preguntamos si durante este tiempo ha notado evolución en su forma de afrontar la fotografía: “Sí, ahora me fijo más en peculiaridades y vas descubriendo mejores prestaciones de las cámaras, aunque yo tengo una sencilla, sin teleobjetivo; iré poco a poco, a ver si en un futuro puedo tener una mucho mejor ”. Nos reconoció también su

predilección por el paisaje y que seguirá participando si continúa convocándose este maratón, si bien no ocultó la dificultad del reto que ya tendrá el próximo año, al verse obligada a abandonar la categoría juvenil. El globo terráqueo le hizo mucha ilusión, porque “el que tenía ya era muy antiguo”.

Asimismo, nos reveló que “desde pequeña ya estaba haciendo fotos a todo. Ahora, al atardecer salgo por aquí, por Cabranes, donde noto mucha diferencia con respecto a Gijón” (ciudad en la que vive y estudia), “con respecto, sobre todo, a la naturaleza y a lo que de ella puedes descubrir por estos parajes”.  Y asegura que se presentó de nuevo “por la ilusión que me hace y por la tradición que ya hay, pero lo importante es estar y participar”.

En cuanto a Gerard, a quien ya entrevistamos en nuestro anterior número, significó que haber elevado y dado exclusivid a la dotación económica del premio (antes era menor y con dos accésit) “mejora y seguirá mejorando el interés por el certamen, no sólo aquí, en el Concejo, sino de fotógrafos o aficionados de otros lugares”.

El enfoque que tenga la próxima edición de Lluz de Seronda está por descubrir.

Lo que ya se puede degustar son las imágenes mejores de ésta última, ya expuestas en dicha Casa de Cultura, con un apartado especial dedicado a las presentadas históricamente a este maratón por Camilo Joaquín Blanco Cobiella (fallecido el pasado 8 de septiembre y gran entusiasta de la fotografía). | Fotos: EL ECO

Fotografia de Enrique Muñíz (Kiku)

OBITUARIO. En memoria de:

ENRIQUE MUÑIZ CUESTA (1957-2021)

Nació en Torazo el 28 de Junio, hijo de Enrique Muñiz Montes (de Hería) y de María Delfina Cuesta Oro (de Torazo); nieto por línea paterna de Braulio Muñiz Díaz y de Enriqueta Montes Préstamo; y por la materna de Manuel Cuesta Corripio y de Josefa Oro Sanfeliz. Casado con Nilza de Paula Fagundes. Falleció en su domicilio de El Cantón-Torazo a las 15:40 del 31 de diciembre.

Un alegrador de la vida

Creaba ambiente. Tenía un don especial y peculiar para hacerlo. Cuando él llegaba, o donde él estaba, reinaba rápido y sin interrupción la sonrisa y el entretenimiento, con sus comentarios y su ánimo, siempre a favor.

Su impronta  -la que más nos deja-  era su forma de ser, anclada en esa predisposición permanente a inyectar vida, incluso con la enfermedad  -crónica, del aparato circulatorio-  acosándole y restándole.

De esa forma de ser era consustancial su característica melena, destacable en cualquier sitio; lo mismo que su pasión por los motores. Ya los hacía funcionar y rugir desde bien pequeño y esa inclinación la acentuaba no tanto en la mecánica como en el propio disfrute de sacarles partido en la conducción. Recordable es cuando andaba por Torazo con una “Puch”  -aquellas de trial-  con la que bajaba la escalinata de la iglesia como un cohete. Y si pensamos en su medio más profesional  -el tractor-, difícil resultaba no saber de lejos que ya llegaba Kiku a bordo, por su especial forma de pisar el acelerador o simplemente, acaso, porque propiciaba de forma rebuscada ese ruido.

Imagen de Kiku

Kiku llenó de leña y de calor muchas casas, y también muchas parrillas. Con su hermano, José Manuel (concejal del Ayuntamiento de Cabranes entre 1983 y 1987 y fallecido el 2 de enero de 2008), fundó una empresa para la extracción y el corte de la madera que le granjeó probablemente más gustos que contratiempos y a la que le resultó imposible renunciar, seguramente, también, por su adherencia vocacional o por su costumbrismo en el asunto.

En la tertulia, era aquél con el que estabas y se te iban las horas sin pizca de aburrimiento, en un rimero inacabable de anécdotas y detalles disfrutables cien por cien.

Tampoco era ajeno a saber apoyar momentos y hechos de versatilidad  -se puede entender-  en sus concepciones. Contó, por ejemplo, el sacerdote oficiante de su funeral (don Juan Carlos Tamayo) cómo jugaba con su nieto, Íker, haciéndose pasar, precisamente, por algo que ya había sido, monaguillo, ¡hasta tocando la campanilla en un hipotético ofertorio!. O jugando al parchís. ¿Y quién ganaba más veces, él o tú?, le preguntamos a Íker. “Casi por igual”, nos respondió, “pero me acuerdo que cuando me comía una ficha siempre decía: ¡Hála, p´a casa, que llueve!”.

Con Kiku, y a esa edad tan injustamente temprana, se ha ido también  -perdimos-  una fabulosa enciclopedia de conocimientos respecto al nombre y precisa ubicación de todos los praos de Torazo y alrededores, y quiénes eran sus dueños; hecho prodigioso atribuible a su etapa más joven, cuando, en sociedad con su citado y único hermano, compraron una segadora y se dedicaron  -sobre todo en la época estival-  a admitir encargos y a segar esos predios. Conocía asimismo todas las fuentes y seguridad plena daba el recurso a él; es decir, si querías saber algo de un prau, Kiku: Infalible, una enciclopedia viviente.

Tantos hechos a favor y su circunstancia personal tan adversa  -silla de ruedas incluida en su tramo final-  dieron a su despedida, en el cementerio primero y al día siguiente en el templo toracense, un masivo testimonio de arropamiento, hacia su talante y hacia sus familiares, con un silencio de respeto y de pena seguido rigurosamente y pocas veces visto.

Porque, en testimonios que hemos recogido, “era un corazón excepcional; si un vecino tenía un problema, ahí estaba él. Y con los niños fue siempre muy cariñoso, comprándoles chucherías”.

A finales de julio de 2008  -en octubre Torazo sería Pueblo Ejemplar de Asturias- contrajo matrimonio con Nilza de Paula Fagundes, decisión que le acrecentó personalmente y le puso en el camino de conocer zonas del Estado de Goiás, en Brasil, un país que terminó siendo, sentimentalmente, también el suyo.

Bravura, lucha, honestidad y autenticidad, tesón, coherencia con las soluciones que fue encontrando. Kiku peleó hasta casi el final con su tractor y sus depósitos de madera (como el de “La Rozona”), contra su enfermedad, con una forma de vida y con una forma, a la postre admirable, de compromiso y de lealtad con sus personales causas, las que se impuso, las que halló.

Ese legado de integridad, de alegrador de la vida y de buen chaval quedará asociado a Torazo y a nosotros, a cuantos le conocimos y disfrutamos de su presencia y encantos. Ser alegrador de la vida es una virtud que Kiku tuvo y expandió, que nos deja en su recuerdo y en la aspiración de imitarle. ■ Foto de la página 19 solicitada a la familia y facilitada por ésta, que agradecemos.

Esquela de Enrique Muñiz (Kiku)
El tiempo en Cabranes

AGENDA

Sol y frío (con heladas) nos acompañarán hasta el martes, 25. Un contraste que contempla sólo débiles perturbaciones, sin lluvia (salvo debilitamiento inesperado de la estabilidad actual).

El pensamiento: Todo cuanto se espera con amor acaba llegando. / José Antonio Mases, en “La Casa” (su última novela)

AVISOS

Semáforo covid. Asturias supera los cien mil infectados (más de 26.000 entre el 28 de diciembre y el 8 de enero) y la tasa de incidencia alcanzó este jueves los 3.126 por cada cien mil habitantes. La previsión es que siga aumentando tres semanas más, con muy alta contagiosidad, aunque menor agresividad. El Gobierno de España ya diseña el Plan que vigilará la covid como la gripe, mediante un sistema centinela que seguirá la evolución sin tener que registrar cada caso. El debate es cómo transitar a un modelo que trata este virus como una enfermedad más y mantener la alerta ante el riesgo de nuevas variantes.

Fútbol femenino. Este sábado, 15, a las 11:30, en el Polideportivo municipal de Santa Eulalia juega el Rodiles partido de la Liga femenina de fútbol-sala.

Los Villares, sin fiesta. De San Antón y mascotas. Correspondía este domingo. Suspendida por segundo año consecutivo, por el covid.

►Fútbol televisado en abierto. Suspendida la Liga por la Supercopa de España, se reanuda el miércoles, 19, con el Lugo-Almería (21:00 h.); viernes, 21, Tenerife-Real Oviedo (21:00 h.); y lunes, 24, Almería-Éibar (21:00 h.). Por Gol

Fase lunar: Estamos en cuarto creciente hasta este lunes, 17. Del 18 al 24, llena. El 25 entra el menguante.

Imagen de Covadonga Solares y de Manuel Corrales García

CULTOS:

 Domingo, 16 de Enero. Semana segunda del Tiempo Ordinario

   La boda de Caná de Galilea

    Iglesia de Fresnedo. Misa a las 10:30.

Iglesia de Torazo. Misa a las 11:45. Por Covadonga Solares Llavona (en esta foto de la derecha, viuda de Bernardo Priede Diego), de La Cotariella, fallecida el 18 de enero de 2021 (EL ECO nº 278).

Iglesia de Santa Eulalia. Misa a las 13:00 horas. Por José Antonio Llavona Uribelarrea (fallecido el 31 de agosto de 2019) y por sus padres José Llavona Hevia (Pepe, fallecido el 27 de febrero de 2002) y María Lila Uribelarrea Ardura (fallecida el 27 de marzo de 1987),  hermano  y  padres  de  María  Lila Llavona Uribelarrea (esposa de Eduardo González Llames).

 Jueves, 20 de Enero.  

 Iglesia de Torazo. Misa a las 17:00 horas. Sin aplicación pedida con antelación.

 Domingo, 23 de Enero. Semana tercera del Tiempo Ordinario

   De la Palabra de Dios

        Iglesia de Fresnedo. Misa a las 10:30.

        Iglesia de Torazo. Misa a las 11:45. Por Pilar Llera Cabranes (de La Miyar, fallecida el 27 de diciembre de 2009) y por su esposo, José Modesto Fernández Fernández (Pepe, fallecido el 18 de enero de 2019).

 Iglesia de Santa Eulalia. Misa a las 13:00. Por Manuel Corrales García (en esta foto de la izquierda, fallecido el 20 de diciembre de 2008) y por su esposa, Delfina Madrera Huerta (fallecida en Gijón el 25 de enero de 2012).  EL ECO, Archivo

 Jueves, 27 de Enero: Iglesia de Torazo. Misa a las 17:00 horas. Sin aplicación pedida con antelación.

Imagen de las terrazas de Santa Eulalia de Cabranes

ÚLTIMA PÁGINA…, HASTA EL 28 DE ENERO

El pacto de las terrazas

Preguntó el concejal del Partido Popular, Juan Ramón Oro, en el Pleno del pasado lunes, día 3, si existe algún abono establecido de tasa por el uso del terreno público (al efecto  -señaló-  el parque de La Sienra, en Torazo, para la celebración de algunas bodas, como la autorizada en resolución de fecha 15 de octubre para el sábado 16, de 10:30 a 15:30 horas); y añadió  que “si no lo hubiera, me gustaría proponer al equipo de Gobierno que se generase esa tasa, por lo menos para el mantenimiento del entorno de esa Plaza”. Le respondió el Alcalde, Gerardo Fabián, que “somos un Ayuntamiento con una capacidad de gestión limitada, no tenemos Ordenanza sobre esa tasa ni la intención de tenerla, porque lo que hacemos con la ocupación de plazas y espacios en varios puntos del Concejo  -ejemplos: la Plaza del Emigrante y calle Jesús Arango (en Santa Eulalia), en el pueblo de Arboleya y en otros lugares, incluido Torazo-  es hablar siempre con los que la utilizan y establecer con ellos una colaboración en la limpieza a cambio de su uso. Así ocurre con el mercado mensual: No cobrarle a la Asociación El Tenderete y que nos dejen la Plaza impecable. En Torazo, el acuerdo es con la Hostería y estamos encantados de que aquella rebollera tan estética de La Sienra sea escenario de bodas, que con gran honor autorizamos. Si cobrásemos tasa nos veríamos en la obligación de estar allí con más presencia y personal de limpieza y no tenemos capacidad para ello ni nos saldría rentable. A día de hoy, esa es la idea”. | Foto: EL ECO, en Santa Eulalia

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